¿Qué propiedades beneficiosas poseen las cebollas?

Comer alimentos naturales como frutas, verduras y encurtidos reporta numerosos beneficios para el cuerpo y esto lo sabe hasta el más simple. No obstante, no todos los alimentos tienen los mismos aportes. No aporta lo mismo una ración de aceitunas que una ración de altramuces. No obtenemos lo mismo sazonando una receta con alcaparras que con cebollas. Precisamente sobre este último ingrediente nos vamos a centrar para enumerar los beneficios de su consumo. Y no son pocos. Por eso es que vamos a enumerar los múltiples beneficios que se derivan del consumo regular de cebolla.

Propiedades beneficiosas de las cebollas

Las propiedades de la cebolla son numerosas y evidentes. Uno de los beneficios más inmediatos para nuestro organismo es que la cebolla favorece las digestiones lentas, lo que repercute en un mejor funcionamiento de nuestro aparato digestivo. Además, las cebollas poseen un alto aporte vitamínico. Esto se debe a que en la cebolla podemos encontrar concentradas vitaminas A, B, C y E.

Siguiendo con los aportes nutricionales de la cebolla, cabe mencionar que su altísimo contenido en potasio ayuda a fortalecer especialmente los músculos y el sistema nervioso. A su vez, un más discreto pero considerable contenido en fósforo ayuda a fortalecer la actividad intelectual. Por otra parte, su alto contenido en quercetina la convierte en un preventivo efectivo contra la osteoporosis.

Pero es que los beneficios de la cebolla ya comienzan incluso antes de su ingesta. Con el simple acto de inhalar su característico aroma, la cebolla actúa como bronco-dilatador. Esta característica ayuda a despejar los conductos respiratorios y a facilitar la respiración, lo que supone un alivio temporal en casos de asma o bronquitis. También viene bien contra malestares temporales como la gripe o el refriado. Esta característica de la cebolla se debe sobre todo al alilo, un aceite que posee la cebolla en sus capas más superficiales y cuyas partículas solemos inhalar cuando nos paramos a olerla. Es conocido por todos el remedio casero de, en caso de tos, dormir con un plato con una cebolla cortada por la mitad. Y no son pocos los que dicen que funciona con una efectividad magistral.

Pero el beneficio estrella de la cebolla, el más famoso de todos, es que es un potente disolvente del ácido úrico. Esto se debe a que la cebolla es un alimento diurético. Por lo tanto, sus componentes ayudan a combatir las acumulaciones de orina en el organismo y por lo tanto, a prevenir infecciones derivadas de este y enfermedades como la gota. Esto también termina derivando en un mejor funcionamiento de los riñones y las articulaciones. Pero es que además la cebolla ayuda al correcto funcionamiento de la próstata en los hombres, característica que comparte con otros alimentos como el tomate. Y hablando de enfermedades, el consumo habitual de cebolla también ayuda a combatir el reumatismo.

No obstante, las propiedades beneficiosas de las cebollas no sólo se notan por dentro. También se notan por fuera. Un beneficio del consumo de cebolla del que poco se suele hablar y que poca gente conoce es el siguiente: La cebolla ayuda a combatir la aparición de caspa y la caída del cabello. Esto es gracias a que posee componentes que atacan las bacterias del cuero cabelludo, resultando en un buen bactericida. De hecho, gran parte de los champús para el cabello que se comercializan en tiendas están elaborados con componentes extraídos de la cebolla. Pero es que la cebolla no sólo ayuda a prevenir la caída del cabello, es que su consumo regular ayuda a un crecimiento fuerte y sano del mismo.

Y siguiendo con la temática de salud y estética, el consumo de cebolla también ayuda a rejuvenecer y mantener limpio el cutis. Esto es debido a la actuación de los aceites naturales de la cebolla. A través de un consumo regular, estas actúan sobre la dermis ayudando a eliminar bacterias y a combatir imperfecciones.

Conclusiones finales

Podemos dividir los numerosos beneficios de la cebolla en tres: Los que mejoran el funcionamiento de funciones corporales como las digestivas o respiratorias. Los que ayudan a combatir problemas internos de salud como los problemas respiratorios o urinarios. Y por último, los beneficios externos como el fortalecimiento del cuero cabelludo o el cuidado de la dermis.

Sea como sea, si este alimento ha llegado a estar tan arraigado en nuestra gastronomía patria, sin duda es por los enormes beneficios que posee y que aquí han quedado enumerados.

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